Se trata de una extensa franja de la cuenca del río Limarí y se busca proteger la biodiversidad, frenar la degradación ambiental y visibilizar su valor ecológico.
En el Parque Recreacional Los Peñones de Ovalle se realizó este sábado el cierre del proyecto “Un Humedal Urbano para Ovalle”, iniciativa impulsada por la ONG Limarí Tinkuy y financiada por el Fondo Regional de Medio Ambiente. La jornada contó con la participación del alcalde Héctor Vega Campusano, concejales y representantes de organizaciones sociales y ambientales.
El proyecto, que se desarrolló durante varios meses, propone declarar como humedal urbano una extensa franja de la cuenca del río Limarí, con el fin de proteger su biodiversidad, frenar la degradación ambiental y visibilizar su valor ecológico.
“Estamos recibiendo esta propuesta de parte de la ONG Limarí Tinkuy y la vamos a trabajar junto a nuestro equipo técnico y con el Departamento de Medio Ambiente, para afinarla y presentarla al Ministerio del Medio Ambiente. Es una propuesta muy interesante, que se va a socializar y construir en conjunto con las organizaciones”, expresó el alcalde Héctor Vega.
Por su parte, el director del proyecto, Germán Arredondo, explicó que el trabajo partió con un levantamiento de información socioambiental entre los sectores de Las Compuertas y La Chimba, pero la participación ciudadana y el interés comunitario por proteger el río motivaron una ampliación del polígono de estudio, alcanzando actualmente el tramo entre el embalse Recoleta y Barraza, con la posibilidad de extenderlo hasta Sotaquí.
Arredondo recalcó que actualmente se están evaluando tres propuestas de delimitación para la eventual declaratoria de humedal urbano:
1. Desde la compuerta del Embalse Recoleta hasta Barraza: abarca cerca de 60 km lineales y 523 hectáreas.
2. Desde Carachilla hasta La Chimba: comprende 24,5 km y 207 hectáreas.
3. Solo tramo urbano entre puente fiscal y puente La Chimba: con una longitud de 6,5 km y una superficie aproximada de 59 hectáreas.
“El objetivo es entregar este informe técnico al municipio, para que evalúe cuál es la alternativa más adecuada para Ovalle, considerando también la percepción ciudadana, y pueda formalizar una solicitud de declaratoria ante el Ministerio del Medio Ambiente”, concluyó Arredondo.
Con esta propuesta, Ovalle avanza hacia una gestión ambiental participativa y una mayor protección de su principal cuerpo de agua, amenazado hoy por actividades inmobiliarias, extracción irregular de agua y presión antrópica en su ecosistema.